Besalú es uno de los pueblos medievales mejor conservados y bonitos de España.

Ubicado en la provincia de Girona y perteneciente a la comarca de La Garrotxa, es de esos pueblos que no pueden faltar en un roadtrip por Cataluña.

Durante toda la Edad Media, Besalú gozó de una gran importancia comercial, de ahí la gran cantidad de edificios importantes que se construyeron y que, por suerte, han llegado a conservarse.

Hasta tal punto, que ha sido declarado como Conjunto Histórico Nacional.
Todo un viaje en el tiempo recorriendo calles empedradas, iglesias románicas, puertas de madera con siglos de antigüedad y todo ello, rodeado de un precioso entorno natural.

Su visita se puede hacer perfectamente en un día, e incluso una mañana ya que no es demasiado grande, así que se puede combinar perfectamente con algún pueblo cercano.
En esta entrada os contamos 10 cosas que no debéis perderos de esta joya medieval y por supuesto, con muchas fotos:
1. Cruzar el Puente Medieval
Cómo no, debemos comenzar con el símbolo de Besalú, su espectacular Puente Medieval.

Sus 150 metros de puente fortificado nos permiten salvar las aguas del río Fluvià, siendo la mejor entrada posible al centro del pueblo.


Fue construido en el siglo XII pero debido a su función de defensa, ha sufrido numerosos daños y reconstrucciones. La última durante la Guerra Civil en el que se destruyeron dos de sus arcos.

Pero como en otras tantas veces, fue reconstruido minuciosamente, luciendo hoy día de maravilla e impresionando de la misma forma que lo ha estado haciendo durante siglos.

Hay que decir que antes de este puente, hubo otro original del siglo XI, pero fue arrastrado por la fuerza del agua en el año 1315. Entonces, el rey que gobernaba en aquella época, Jaime II, decidió construir la maravilla que vemos hoy día.

Es considerado como uno de los monumentos más bonitos de toda Cataluña, con su espectacular perspectiva de los 7 arcos, la torre fortificada de planta hexagonal y el pueblo al fondo.

Curiosamente, el puente también servía para el control de acceso de los comerciantes, quienes tenían que pagar un impuesto al llegar a la torre, llamado pagus condal.

La verdad es que el puente es una pasada.

¡Una delicia para los ojos!
2. Adentrarte en el Barrio Judío
Nada más cruzar el Puente Medieval, llegarás al otro gran atractivo de Besalú: su pintoresco Barrio Judío.

O como se dice en Cataluña, el call.
Un entramado de callejuelas en el que parece que el tiempo se ha detenido.

Justo lo que venimos buscando, ¿no?

La judería tuvo su origen con 20 familias que se instalaron en el siglo IX y que prosperaron rápidamente. Gozaron de una gran importancia por las profesiones que ejercían: prestamistas, médicos, comerciantes,… Gracias a ello, podían pagar altos tributos al señor feudal y por tanto, disfrutar de ciertos privilegios.

Mientras, el resto de población eran en su mayoría campesinos o ganaderos.
Como en tantas otras partes del país, los judíos convivieron en total armonía con los cristianos durante siglos. Pero con el tiempo, la relación se fue haciendo más complicada, sobre todo cuando llegó la peste negra. Los judíos, que llevaban un estilo de vida más higiénico, aguantaron mucho mejor la enfermedad, mientras que el resto de los cristianos sufrieron lo inimaginable. Esto originó un gran recelo y empezaron a ser mal vistos. Finalmente, al igual que con los musulmanes, fueron expulsados por los Reyes Católicos en el siglo XV.

Por suerte, la judería se pudo conservar y de hecho, es considerada como una de las más importantes del país.

Piérdete sin rumbo por sus calles, aunque en tu ruta no pueden faltar la Calle Rocafort, la Calle del Mestre Abraham des Catllar o la Calle del Portalet.

Y no dejes de fijarte en los detalles, como las inscripciones o los huecos que hay al lado de la puertas y que servían para guardar el pergamino con los textos sagrados de la Torah (mezuzà).

Como podéis ver, la herencia judía está aún muy presente y de hecho, pertenece a la Red de Juderías de España.

💡Si no os queréis perder detalle del barrio y conocer toda su historia, puedes contratar este tour por el barrio judío de Besalú y que incluye también la entrada a La Mikvé.
3. Visitar la Antigua Sinagoga y La Mikvé
Sin salir del Barrio Judío y bajando por la Baixada de la Mikweh, llegamos al lugar en el que se encuentran los restos de la Antigua Sinagoga y La Mikvé.

Te preguntarás que es un Mikvé, ¿verdad?
Es donde se realizan los baños de purificación de hombres y mujeres en los rituales del judaísmo. Básicamente es una pequeña piscina de agua en el que se puede sumergir completamente una persona.

Fue descubierto en la década de los 60 por un vecino tras unas obras en una antigua fábrica, siendo todo un evento, ya que se trata del único de época medieval (siglo XII) que se ha conservado en España.
Sólo se puede acceder mediante una visita guiada de la Oficina de Turismo, en el que se bajan 36 escalones hasta llegar a una sala interior en la que se encuentra la piscina rectangular.
4. Contemplar la Plaza de la Llibertad
Continuando por Carrer del Pont Vell, llegarás a la plaza principal de Besalú: la Plaza de la Llibertad.

También conocida como Plaza Mayor, se trata del lugar con más vida y a donde van a parar todas las calles principales del pueblo.

En ella, encontrarás el Ayuntamiento, algunas cafeterías y tiendas protegidas bajo unos bonitos soportales que hay en cada uno de los laterales.


Este fue el lugar elegido por HBO para rodar algunas escenas de la serie Westworld, así que si las has visto, seguro que te suena.

Eso sí, no ha sido el únicoa rodaje en Besalú, también ha sido el escenario de algunas escenas de Juego de Tronos o El Perfume entre otras.
5. Visitar la plaza e iglesia de Sant Pere
Saliendo por una de las calles de la Plaza de la Llibertad (Carrer del Canó), llegarás a la otra plaza importante de Besalú, la de Prat de Sant Pere.

Se trata de una plaza muy amplia, la más grande del pueblo y que cuenta con varias cafeterías y restaurantes con sus terrazas y mucho espacio para que jueguen los niños pequeños.

Por cierto, es aquí donde se instala todos los Martes el mercadillo del pueblo y en el que se pueden comprar desde productos locales hasta souvenirs.
Pero el verdadero protagonista de la plaza es el Monasterio Benedictino de Sant Pere, una de las joyas románicas de Besalú y de los edificios más importantes de toda la zona.

Construída en el siglo X, su apariencia es bastante sobria, cumpliendo con los cánones de su estilo arquitectónico. En su fachada, solo destacan las estatuas de dos leones que hay a ambos lados de una ventana de arco de medio punto y que representan el poder y la protección de la iglesia frente al mal.

Ya en su interior, si que hay cuatro pares de columnas bien decoradas y un bonita girola circular del ábside, algo poco común en este tipo de arquitectura.
Hay que decir que la visita también se hace a través de la Oficina de Turismo (es gratuita) o con el billete del tren turístico.
En la plaza también está la Casa Cornellà, un buen ejemplo de arquitectura civil románica. Fue construida en el siglo XII y su interior se puede visitar, pudiendo conocer cómo era por dentro una casa señorial de la Edad Media, recorriendo el establo, la planta baja o la planta noble entre otros.

Y en contraste con toda la plaza, e incluso el pueblo, está el Circusland.

Ubicado a la derecha del monasterio y formando parte del recinto de los claustros, se trata de un edificio de arquitectura racionalista, muy del estilo a las películas de Wes Anderson y que para nada sigue la estética medieval, aunque hay que decir que es bastante bonito.

En su interior, está el primer museo dedicado al circo en Europa.
6. Probar la ratafía
Si quieres probar algo complemente típico de Besalú, tienes que buscar la ratafía, un licor dulce hecho a base de más de 40 tipos de hierbas, frutos secos y granos de café.
Un licor fuerte que, además de buen digestivo, se le atribuyen propiedades medicinales.
E incluso los lugareños dicen que hasta tiene poderes mágicos, ya que en su origen, se tenía la creencia que era preparado por las brujas, y que para su elaboración, dejaban el licor al aire libre durante varias semanas para captar la magia del Sol y la Luna…
Sea o no verdad, sin duda alguna, es el mejor souvenir que te puedes traer de Besalú.
7. Perderse por sus calles
Como siempre decimos, en estos pueblos lo mejor que puedes hacer es callejear sin rumbo.

Dejarse llevar para descubrir todos sus bellos rincones.

Calles sombrías, puertas antiguas, fachadas, arcos, pórticos y elementos decorativos que han perdurado hasta el día de hoy.


Todo, o casi todo, aparenta tener siglos de antigüedad y cómo podéis imaginar, eso da mucho juego para las fotos.

Únicamente algunas esculturas modernas, como sillas colgadas desde algunas fachadas, nos hacen volver a nuestra época.

No te vayas sin antes visitar la Iglesia de Sant Vicent, otro templo románico del siglo XII y que en su interior se custodia un trozo de la Vera Cruz (la «Verdadera Cruz» donde fue crucificado Jesús).
La importancia de esta reliquia ha atraído desde siempre a multitud de peregrinos que venían a postrarse ante ella.
Precisamente, ese fue el motivo de la creación de la Antigua Iglesia-Hospital de Sant Julià, otro edificio románico que se construyó en el siglo XII por los condes para atender a estos peregrinos y los pobres que pasaban por la ciudad. Solo se conserva la fachada de la antigua iglesia y no se puede visitar, ya que su uso actual es de centro socio-cultural.

Otra de las cosas que tienes que ver, son algunos de los antiguos accesos que formaban parte de la muralla del siglo XIV y que se han llegado a conservar, como es el Portal dels Horts o Portal de Pere III.

💡Nuestra recomendación es que os apuntéis a este free tour en el que seguro os descubren más rincones u os cuentan anécdotas interesantes del pueblo.
8. Posturear en la esquina del Café Esplendide
Como habéis podido ver, Besalú es «carne» de Instagram, sobre todo su puente.
Pero a nosotros también nos pareció muy fotogénico la esquina izquierda a la salida del Carrer del Canó.

Y es que en la fachada de este edificio abandonado, hay un bonito letrero que simula a un antiguo local: Café Splendide.
Pero lamentablemente, el Café Esplendide nunca ha existido y es que se trata de un parte de la decoración del rodaje de otra película que hubo en 2020: The Path.
En ella simula un antiguo café francés aunque la realidad es que aquí había antiguamente una frutería.

Eso sí, se verdad o no, es una esquina que nos hace viajar a unas cuantas décadas atrás.
Hemos de decir que somos muy fans de este tipo de letreros antiguos y siempre que nos topamos con alguno, no dudamos en posturear un poco.
Aunque forme parte de un decorado.
9. Pasear por la ribera del río Fluviá
Una vez visto el casco histórico, nuestra recomendación es que bajéis hasta la orilla del río Fluvià para ver las casas de la judería desde otra perspectiva igual de impresionante.

Puedes llegar desde cualquiera de las calles que dan a la parte sur y que conectan con un paseo que va bordeando el casco antiguo.

Pero no te límites solo a ello.


Baja hasta el lecho fluvial y recorre parte de la Anella Verda, que cuenta con una serie de itinerarios que pueden recorrerse tanto a pie como en bicicleta y que permite conocer parte del entorno natural de Besalú, sus huertos e incluso un antiguo molino harinero.

Y por supuesto, llega hasta al mismo río y observa a los patos chapoteando en el agua.


Como veis, nuestra pequeña disfrutó de lo lindo con ellos.

Por cierto, tampoco os vayáis sin antes bajar hasta la base del puente, donde podrás capturarlo desde otra perspectiva diferente e igual de espectacular.

10. Visitar los alrededores
Porque como hemos dicho ya, Besalú está rodeado de muchísimos más atractivos, siendo ideal combinar su visita con alguna del alrededor.
Y es que La Garrotxa es una de las regiones más interesantes y variadas de toda Cataluña.
Nuestra recomendación es la Zona Volcánica, visitando el Volcán de Santa Margarita y del Croscat, a los que se llega a través de sencillos senderos.

También puedes visitar la Fageda d’en Jordà, un precioso boque de hayas; o bien pasear por la orilla del lago de Banyoles.

Y si no, también puedes visitar algunos de los pueblos cercanos como son Castellfollit de la Roca o Santa Pau.
💡Para los que nos disponéis de vehículo propio, esta Excursión por la Garrotxa o este otro Tour por los Pueblos Medievales de la Costa Brava son sin duda una buena opción.
Información Práctica
¿Cómo llegar a Besalú?
Llegar a Besalú es bastante sencillo y puedes hacerlo con las siguientes opciones:
- Coche: es la mejor opción, ya que podrás combinar la visita con otros pueblos de la zona. Desde Barcelona hay una hora y media de trayecto; y desde Girona, apenas media hora. Si no dispones de uno propio, puedes reservar un coche de alquiler al mejor precio directamente desde este enlace.
- Bus: si no dispones de coche propio, puedes llegar también en bus gracias a la empresa Teisa con conexiones desde las principales ciudades catalanas. Por ejemplo, desde Barcelona son 25 € ida y vuelta.
- Tren: lamentablemente, Besalú no cuenta con estación de tren. La más cercana está en Girona y desde allí, tendrás que tomar uno de los autobuses que antes comentábamos.
- Excursión: si no os quereís complicar la vida, también puedes contratar algunas de la siguientes excursiones:
¿Dónde aparcar en Besalú?
Cuenta con varios aparcamientos gratuitos en los exteriores del pueblo. El más grande está justo a la entrada del puente, siendo la mejor opción.
¿Dónde comer en Besalú?
Besalú también cuenta con varios sitios interesantes para comer, como son el Restaurant Pont Vell, la Curia Real o Els Fogons de Can Llaudes, en los que se respira una ambiente medieval.
Lamentablemente, a nosotros solo nos dio tiempo a desayunar y para ello elegimos el 10 del Pont, un pequeño café con terrazas, justo al lado de los restos de la Antigua Sinagoga y vistas al río Fluviá.

Muy rico todo.
¿Dónde dormir en Besalú?
Aunque lo más normal es que visites Besalú durante el día, alojándote en otra ciudad o zona, el pueblo cuenta también con alojamientos para todos los presupuestos.
Uno de los alojamientos más emblemático es el Hotel 3 Arcs, un pequeño establecimiento con mucho encanto y ubicado en pleno centro histórico, siendo la entrada ya una preciosidad.

No obstante, siempre recomendamos que hagáis una búsqueda general para encontrar el alojamiento que mejor se adapte a vuestras necesidades y gustos.

Fiestas y festivales de Besalú
Besalú, además de ser un pueblo precioso, cuenta con varios festivales que hacen la visita aún más interesante:
- Besalú Medieval: se celebra el primer fin de semana de septiembre y es el más importante de todos. El pueblo da un viaje al pasado gracias a las pequeñas tiendas de artesanías y talleres de oficios; a la gente vestida de la época y a los espectáculos de música y danza. Además, hay recreaciones de combates de caballeros y todo el pueblo es decorado con banderolas.
- Besalú Ciudad Judía: muy del estilo al anterior, se celebra en el primer fin de semana de Marzo. La temática gira entorno a la influencia y paso de los judíos por Besalú.
- Esta noche, Besalú: y por último, todos los Miércoles de Julio y Agosto, se realizan varias funciones teatralizadas ambientadas en la época medieval durante la noche (a partir de las 22 h).
Oficina de Turismo
La oficina está ubicada al inicio del Puente Medieval y en ella podrás preguntar e informarte de todo lo que necesites.
Además, en ella, podrás contratar las visitas guiadas para visitar el monasterio o La Mikvé.
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